Jesús Resucitado

(1982)

Jackie Hass, de Pennsylvania, recibió esta foto con las de los rollos que había solicitado revelar e imprimir, de la peregrinación que realizó con su esposo a Tierra Santa, en octubre de 1982; fue tomada con una cámara Kodak instamatic 110. No recordaban haber visto la imagen, así que envió copias a los museos que habían visitado para preguntar en cuál se encontraba el cuadro. Todos le respondieron que no estaba en sus respectivos acervos. Después, revisando la gran cantidad de negativos de aquella peregrinación, encontraron el de la imagen, intercalada con las de las tomas al Santo Sepulcro. La copia que aquí se ostenta fue facilitada por Richard Faenza, de Malta. La imagen es extraordinaria en varios sentidos:

Las pupilas están muy dilatadas y los colores muy saturados, de acuerdo al ámbito oscuro del Sepulcro.

Su mirada parece fijarse más allá del observador, este efecto cesa si se le ve de muy cerca.

El áurea es de una extensión e intensidad impresionantes. Es la luz que radió a la Sábana imprimiendo en ella el Cuerpo del Señor.

El manto pende del hombro derecho, cuando éste se usaba sobre el hombro izquierdo para dar libertad de movimiento a la diestra, según se puede observar en esculturas y pinturas griegas y romanas, por lo tanto la fotografía está inversa, a similitud del Sudario.

Unos cinco años después, la fotografía llegó a las manos del Padre José Aleson (Agustino) en España. El Padre recibió inmediatamente con el conocimiento infuso de que la imagen era Jesús Salvador en su imagen real y comenzó a rendirle adoración.

Dos años más tarde, en el segundo domingo de febrero de 1989, Luis Miyar, fotógrafo profesional del pueblo, vio la cara de Jesús en el retrato del Padre Aleson y le pidió permiso para llevarlo a su estudio y allí poder fotografiarle y captar todos los detalles de la foto del Padre José. Al poco tiempo, el buen Padre y Luis comenzaron un grupo de oración en la casa de este último. Durante una de estas reuniones que tuvo lugar en Santander, Garabandal, uno de los participantes, José Ramón, junto a Luis, su esposa Juana María y su hija de siete años Covi, comenzaron a recibir mensajes o locuciones de Nuestro Señor Jesucristo. El Padre José comprendiendo esta gran bendición, le pidió a José Ramón que le preguntara a nuestro Señor sobre la fotografía

Jesús contestó a través de José Ramón:
Hijos Míos: Esta es mi imagen verdadera, hónrenla cada día de sus vidas, yo les otorgaré gracias muy especiales de la misma manera que he derramado gracias sobre aquellas personas que crearon la fotografía original. Cuando esa foto se tomó, Yo estaba allí, Yo estaba presente.
Durante una de las apariciones de Nuestra Madre en Gijón, Asturias, el día 19 de Diciembre de 1989, le preguntaron a Nuestra Señora sobre la fotografía mediante la vidente, María del Rosario Frechoso. Ella respondió:

"Mis queridos hijos, es mi deseo que entre todos ustedes recauden suficiente dinero para que puedan multiplicar las fotografías de mi Hijo, ya que muchos de otros de mis hijos quisieran tener una y aún no la han visto".

Nuestra Madre también solicitó:
"En las fotografías pequeñas impriman al dorso las siguientes palabras: Regalo hecho posible por Nuestro Señor para que todos puedan conocer su verdadera imagen, y que su inmenso amor pueda ser conocido por su imagen verdadera"

En nuestras fotografías grandes Nuestra Madre le pidió a María que le inscribieran al frente; "JESÚS NUESTRO SALVADOR". Muchos le han inscrito estas palabras a la parte de atrás para no dañar la imagen completa cuando las fotos no tienen margen.

Mediante numerosos videntes, locucionistas y mensajeros a través de todo el mundo Jesús a dicho: Yo resido allí vivo, mi presencia está ahí. El padre Aleson (de 80 años en ese entonces) ha relatado que mensajeros le han comunicado que cuado Jesús regrese triunfante muchos le verán salir a él de la fotografía y de la Santa Eucaristía, eso es, esas hostias que están realmente consagradas por sacerdotes devotos. Nuestro Señor nos ha pedido a todos que oremos frente a su imagen tanto como nos sea posible. Sus ojos, siempre verán nuestras almas lo bueno y lo malo. No podemos escondernos de él. También nos ha advertido que la fotografía no debe ser laminada, ni poner un cristal sobre la misma, no se debe repartir la foto indiscriminadamente sino solamente a aquellas personas que la van a tratar con fe sincera, con respeto y reverencia.

Para aquellos que no siempre puedan adorarle a él en el Santísimo Sacramento ya que en muchas Iglesias en estos tiempos es muy difícil en algunas ocasiones conseguir la Iglesia abierta y en otras encontrar el tabernáculo; orar frente a esta imagen, la que Cristo mismo ha dicho es Su Verdadera Imagen; Mi presencia está ahí;. Es la mejor alternativa.

El Padre Aleson relata que Jesús ha pedido a las personas, que oren en la noche entre la medianoche y las 12:15 a.m, si aún están despiertos a esa hora. Esta imagen es de gran utilidad para las personas que por algún motivo de impedimento físico no puede asistir a Misa o a la Adoración del Santísimo.

Estas oraciones fueron reveladas por Jesucristo a las almas escogidas por Él, para que fueran rezadas ante esta Imagen de Su Santo Rostro:

"Mírame y contémplame,

contémplame y ámame,

ámame y bésame".

"¡Oh Padre de Bondad!.

Enséñame a orar

y a pedir perdón

por toda la humanidad".

Deben tratarse estas fotografías con el mayor respecto.

Observaciones:

La foto de Jackie Hass y la Sábana

Tiene una deformidad muy peculiar: el mentón aparece pronunciado; la nariz, curvada, y de frente, no compatible con el perfil del Rostro. Esta deformidad hace aparentar que la foto es a una imagen bidimensional, e impide que coincida en todo con las demás fotografías (otras fotografías aparecidas milagrosamente que se muestran más abajo), pero eso mismo obra para que la imagen ocupe un segundo plano visual en la fotocomposición imprimiéndole tridimensionalidad.

La imagen, girada seis grados, coincide del todo con la de la impresión del Rostro en la Sábana Santa, y los rizos coinciden con las manchas de sangre. Esto confirma que la imagen original está invertida, como lo está la imagen original de la Sábana, a la que tiene que aplicarse el efecto espejo para ver correctamente los lados derecho e izquierdo del Cuerpo.

La deformidad no puede ser corregida mediante las herramientas disponibles en Photoshop y en Corel Paint, pues ésta es la misma que el del barrido por un movimiento de la cabeza que curvó la Sábana Santa, originando las arrugas que arriba y abajo enmarcan el Rostro.

Es notable el rastro de lágrimas. El predicador de la Casa Papal, Rainiero Cantalamessa ha reflexionado que Jesús resucitó en su Cuerpo martirizado, por lo que, de alguna forma, en Jesús Glorioso no cesan los dolores de la crucifixión.