Está en todas partes
Adonde no iré Señor que no sienta
tu presencia viva en todo lo que
me rodea. Este pensamiento, más
que una reflexión es para mí una
convicción que deseo compartirla con
todas las personas que aman las
cosas de Dios, y de manera especial,
con aquellos que aún tienen dudas
de la existencia de un Ser superior
y maravilloso que nos provee de todo
lo que tenemos y necesitamos.
Tan grande y maravilloso que nos regala
cada día el milagro incomparable de la
vida, y junto con esa vida, poder
apreciar y disfrutar de toda su
imponente creación, desde que el
alba despunta al amanecer, con sus
rayos de luz multicolores, que junto
al trinar de esas hermosas aves que
en su lenguaje celestial cantan y
entonan melodías de alabanzas a su
Creador, hasta que la noche se cierra
en medio de un hermoso firmamento
cubierto de una infinita constelación
estelar, donde cada estrella que brilla
en toda su intensidad nos indica que
ahí está Dios presente, que esa
luz permanente es la presencia de Dios
que quiere entrar en nuestro ser para
iluminar nuestra vida y quedarse en
ella hasta el fín de nuestros días.
Sí, mi amado amigo lector, vayas donde
vayas encontrás de alguna u otra manera
la presencia de Dios en todas partes.
No esperes verlo personificado de la
forma como nos lo han pintado,
porque sencillamente Dios es vida,
es amor, es espíritu. Es el aire que
respiras, es el sol que te ilumina por
donde vayas, es la luna que enciende
tus caminos oscuros, es el agua que
sacia tu sed, es todo lo que tienes y
que aún no te das cuenta que en cada
detalle, en cada cosa, o persona que
te sonrie, que te alienta, que te da
fuerzas y te ayuda a salir adelante, solo
puede estar ahí la presencia misma
de Dios, porque de otra manera nuestra
vida no tendria sentido y no tendríamos
la oportunidad de experimentar todos
esos excelsos sentimientos de amor,
amistad, hermandad que Él nos brinda
a cada instante. Sólo gracias a la
presencia viva de ese Padre Celestial
los colores de nuestra vida
adquieren intensidad interminable.
Dios está en todas partes, no importa
donde estes ahora, sólo tienes que llamarlo
y Él te responderá en el mismo instante.
Desconozco Autor