Distinguido señor periodista:
Reciba un abrazo de hermanos de nuestra parte.
Quiero extenderle mis felicitaciones por el comentario
que usted hizo en su sección de "La Opción de las 12"
sobre los discapacitados. Soy Odris Gómez una cantante de
los 80 que cantaba en "El Show del Mediodía" y si no
sabe de mi existencia, yo también estoy en una silla de ruedas
por poliomielitis. Tengo un esposo maravilloso dominicano
igual que yo y, quien también está discapacitado por
un accidente en nuestro país que quedó
sordo y con dificultades para caminar.
Mire, yo emigré porque a base de muchos sacrificios
de parte de mis padres logré una educación decente
en un colegio privado;
pero una vez graduada del bachillerato,no pude ingresar
a la universidad
por no ser acsesible para personas minusválidas.
Aquí en New York
me gradué de educación y literatura con honores.
También he llegado a hacer conciertos en Lincoln Center,
entre muchos más lugares.
Estudié drama, administración de empresas,
y he estado muy envuelta en asuntos que conciernen a
nuestra comunidad latina en los Estados Unidos.
Pienso que más que las barreras arquitectónicas,
son las mentales que más me preocupan por la falta
de educar a un pueblo a crear una concientización,
no basada en el prejuicio y el menosprecio.
No puedo evitar hacer referencia a que el presidente Franklyn Delano Roosvelt, en tiempos de antaño,
fué un gran presidente de Estados Unidos
y estaba en silla de ruedas porque le dió polio como a mí; de que el governador del estado de New York es ciego y
de que hay genios en campo tanto de la política como en las
ciencias; abogados prominentes y gente que pese
a la dificultad en comunicarse
por tener una desabilidad que se lo impide,
son gente muy respetada por
su contribución social y al bienestar de su país.
Lo correcto, es que nadie hace alusión de que estas
personas son diferentes.
Para resumirlo, nos toman en cuenta porque votamos,
porque pagamos impuestos, porque hay leyes que
si no se respetan, hay consecuencias.
Yo no quiero escuchar más que mi país es del tercer mundo.
Los cambios empiezan con
la educación y el cambio de pensar.
Ya estoy cansada de que cuando presentan
un discapacitado en las noticias
o en un show, sea con objetivos sensacionalistas.
La desabilidad no es por lo que se define un individuo
sino por las las atribuciones de ese ser humano.
Quiero dejarle con un pensamiento de que si cualquier persona
que tiene longevidad, eventualmente le llegará un tiempo que
tan solo con levantar un brazo será una odisea.
Es questión de tiempo;
señor periodista, ojalá la palabra tullido,
o inválido, sean erradicadas porque aparte
de ser una falta de respeto a una gran comunidad ignorada,
es ignorante, estúpida, obsoleta y dista mucho
de la realidad en que el mundo de hoy se
desenvuelve. Mire!, yo me recuerdo que estoy
en una silla de ruedas cuando álguien me lo recuerda.
Somos seres humanos. Ojalá en nuestro bello país
empienzen una campaña
de concientizción para todo aquel que tenga un amigo,
un familiar, una persona que aprecia,
para que la gente empiece a ver las discapacidades
desde un punto realista y positivo.
Para los "normales" y usted sabe que esa palabra
no éxiste porque lo que es "normal" para usted
no necesesariamente sea para otra persona, quitarle
mérito a alguien por su condición es ignorancia e injusto.
Muchas gracias después de haberme leido.
Odris Gómez
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