Nada justifica que para lograr que
algo se concrete tengas que resignar
tu serenidad. De hecho, conseguir
algo suele ser más sencillo y probable
si tus esfuerzos están basados en una
actitud calmada y tu espíritu está en paz.
Considera cuánto más efectivo podrías
llegar a ser si tu energía no estuviese
siendo constantemente drenada por el
frenesí de tus pensamientos.
La verdadera serenidad
no implica ausencia de acción, sino acción
con integridad, confianza y una
perseverancia rebosante de sentido.
El mundo puede estar haciendo remolinos
a tu alrededor, en constante ebullición.
Sin embargo, tú no tienes por qué entrar
en ese ritmo. A medida que más frenética
y apurada se vuelve la vida, más sereno
e imperturbable deberías tratar de mantenerte.
Sea lo que fuere que puedas lograr en un
estado vertiginoso y caótico; siendo
perseverante, manteniendo la calma
y estando en paz podrías
lograrlo con mucha mayor seguridad.
Cuando enfrentes una vorágine responde
con serenidad. Te llevará a un nivel superior
de experiencia y concreción.
Mensaje Positivo