No Perder La Fe
Sin aviso, descubrimos un día que el mundo espiritual no despierta el mismo entusiasmo que antes.
Continuamos rezando y frecuentando los cultos, pero no conseguimos engañarnos;
el corazón no responde y las palabras parecen no tener sentido.
Si esto es lo que le sucede a usted en este momento,
sólo existe un camino posible: continúe practicando.
Rece sus plegarias por obligación, o por miedo,
o hágalo por el motivo que sea; pero continúe haciéndolo.
El ángel encargado de recoger sus palabras —y que es también responsable
por la alegría que da la fe— está dando un paseo.
Pero enseguida vuelve y sólo va a poder ubicarlo si escucha una plegaria o un pedido de sus labios.
Insista, aunque todo parezca inútil.
En cualquier momento el ángel regresa
y el simple movimiento de sus alas hará que todo vuelva a ser como antes.
Paulo Coelho
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