~ Paz y Serenidad ~
Permite que tu mente se vuelva
como un lago tranquilo, sin olas,
y disfruta de esta experiencia.
Al finalizar un día, es importante
sentarse con uno mismo y dejar que
la mente se estabilice. Lentamente,
permitir que la mente se vuelva
pacífica y serena, como si el día
entero no la hubiera afectado. Para
esto, has el ejercicio de enfocarse en
un punto específico y concentrarse en
si mismo como si tu fueras un punto.
Visualízate como un punto de luz
brillante; un punto no trabaja y no
actúa, simplemente existe y acepta
la existencia tal cual es. Al hacer este
ejercicio, poco a poco verás tu mente
convertirse en algo más suave y sutil,
lleno de paz y serenidad.
Pensamiento Positivo