escuchar nuestra voz interior es
una de las grandes asignaturas
pendientes de nuestra civilización que
se ha empeñado en enfocarnos en el exterior
y en sobre-estimularnos
hasta la extenuación para
que olvidemos el interior: la calma, la paz,
la intuición, …
La auto-escucha, el silencio, la
respiración, la meditación,
el relax…. Hay muchas vías y herramientas
para conectarnos
con nuestro interior y lo que importa es que
practiquemos alguna.
Como padres para no ser zombies
de teorías de crianza crueles
y antinaturales, como ciudadanos para no
perder el norte
de la sociedad y poder discernir bien entre tanta
información
contradictoria, y como personas para cultivar una
rica vida interior
que nos permitirá ser siempre vencedores de
las circunstancias externas,
sean estas como sean. Esa es la verdadera
fuerza del bambú y esto nos susurra Lao-Tsé: