Guíame
en los caminos que me quedan por recorrer,
llévame por el sendero de
las flores de la paciencia.
Déjame
beber en el manantial de tu sabiduría,
háblame del dolor de mis
hermanos en la tierra,
recuérdame que mis sufrimientos no son los
únicos.
Llévame
por las praderas de la concordia.
hazme recordar que no calle ante
las injusticias,
ayúdame a ayudar a quien lo necesite.
No
dejes que olvide que la humildad es primordial,
acompañame por los
caminos labrados del bien.
Gracias
Señor, porque sé que Tú me escuchas.
Amen