Por unas cuantas monedas vendiste tu dignidad de esa mujer de verdad tu sabes que poco queda
Fue actitud desatinada tan burda especulación hizo trizas tu ilusión de muchacha enamorada
Pues perdiste su querer obviaste la realidad absoluta necedad que no se puede entender
Y lloras desconsolada reconoces la torpeza también tienes la certeza jugaste mucho por nada.
NG
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