Y tu sabes de mi amor inalienable absoluto, total sin condiciones que no entiende de peros ni razones es asunto que luce incuestionable Que por ti llegaría a las estrellas y la luna tambien te obsequiaría lo que quieras, no dudes lo tendrías infinita devoción por la más bella
Pero todo este querer es puro antojo hoy no late por mi tu corazón otro hombre reclama tu pasión titular de tus labios siempre rojos Mi cariño jamás ha de cejar obstinado, del alma, persistente sólo tú eres dama de mi mente en la justa ocasión se habrá de dar.