¿Qué vergonzosos y ocultos pensamientos acechan dentro de ti?
No te sientas mal. Aquello que pudieras pensar que eres tú, en realidad no eres tú. Tú alma es eterna, y es sólo tu ilusorio ego el que tiene esos pensamientos que pudieses considerar vergonzosos o "malos": deseos, antojos, celos, etc.
Por eso es tan importante que encuentres a un maestro o un amigo en quien confíes y con quien puedas hablar. Dile a ese maestro o amigo aquello que te avergüenza decir en público. En el momento en que lo hagas te sentirás más liviano, porque el decirlo en voz alta te permite observarlo como algo que está separado de ti.
No te cohíbas. Haz añicos tu vergüenza. Te darás cuenta que al hablarlo neutralizas el poder que esos pensamientos oscuros tienen sobre ti.
(Si no tienes a alguien con quien hablar, entonces intenta escribirlo).