ES MEJOR DAR
QUE RECIBIR
¡Reparte a manos llenas!
Una palabra oportuna,
una sonrisa,
una actitud animadora,
un pensamiento generoso,
y tu corazón sentirá
esta gran verdad:
¡Es mejor dar que recibir! ¿Nunca lo sentiste?,
¡Experiméntalo!
Ayuda a alguien sin esperar
nada a cambio,
y verás cómo llegará
a tus puertas, con las manos llenas de alegría,
la más grande felicidad
que puedas experimentar
en la vida...
¡La felicidad de dar!
Uno puede ofrecerle sus ideas
a otro como balas
o como semillas.
Puede dispararlas,
o sembrarlas;
pegarle en la cabeza
a la gente
con ellas, o plantarlas
en sus corazones.
Las ideas usadas como balas matarán la inspiración
y neutralizarán
la motivación.
Usadas como semillas,
echarán raíces, crecerán
y se volverán realidad
en las vidas de quienes
fueron plantadas.
El único riesgo de usarlas
como semillas es que una vez
que crecen y se convierten
en parte de aquellos
en quienes fueron plantadas,
es probable que nunca
te reconozcan el mérito
de haberlas ideado.
Pero quién está dispuesto
a darlo todo,
recogerá una rica cosecha.
"No se engañen:
de Dios nadie se burla.
Cada uno cosecha
lo que siembra.
El que siembra para agradar
a su naturaleza pecaminosa,
de esa misma naturaleza cosechará destrucción;
el que siembra para
agradar al Espíritu,
del Espíritu cosechará
vida eterna.
No nos cansemos
de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si
no nos damos por vencidos.
Por lo tanto, siempre que tengamos la oportunidad, hagamos bien a todos,
y en especial a los de la familia
de la fe" Gálatas 6:7-10.
D./A.
