Muere lentamente quien no viaja, quien no lee, quien no oye
música, quien no encuentra gracia en sí mismo. Muere lentamente quien
destruye su amor propio, quien no se deja ayudar. Muere
lentamente quien se transforma en esclavo del hábito repitiendo
todos los días los mismos trayectos, quien no cambia de marca, no
se atreve a cambiar el color de su vestimenta o bien no conversa
con quien no conoce. Muere lentamente quien evita una pasión y
su remolino de emociones, justamente estas que regresan el brillo a
los ojos y restauran los corazones destrozados. Muere lentamente quien
no gira el volante cuando esta infeliz con su trabajo, o su amor, quien
no arriesga lo cierto ni lo incierto para ir detrás de un sueño quien
no se permite, ni siquiera una vez en su vida, huir de los consejos
sensatos... ¡Vive hoy! ¡Arriesga hoy! ¡Hazlo hoy! ¡No te
dejes morir lentamente! ¡NO TE IMPIDAS SER FELIZ!