AHORA, SÍ
Ejercicios de amor, los que ahora hago, y los que hacen conmigo. Sacrificios sin duda, y de dudosos beneficios. Hoy, mérito es amar. Ayer, halago.
Antes, cuando los cisnes sobre el lago, amante era el mejor de los oficios. La humanidad, delicias y delicios pagándose con besos. No era pago.
Dichosa aquella edad, pero se acaba, y el aquel -nunca más-- de todo ello... Se amaba, ¿de verdad?, pero se amaba.
Porque el labio era rojo y era bello, deseaba, buscaba, y lo besaba. ¡Y amor, Dios mío, amor llamaba a aquello...!
|