Primero fileteamos la pechuga de pollo y la salpimentamos. Rallamos el jengibre y lo ponemos en un bol grande. Añadimos la salsa de soja y el azúcar. Añadimos el pollo y lo mezclamos bien, dejándolo macerar durante 15 minutos.
Pasados los 15 minutos escurrimos el pollo y lo salteamos a fuego fuerte en una sartén con un poco de aceite. Retiramos el pollo y echamos en la sartén la salsa que queda de la maceración, junto con el vinagre y el vaso de caldo. Lo cocinamos a fuego fuerte para que se reduzca la salsa.
A continuación colocamos el pollo en 4 platos y echamos la salsa bien caliente por encima.