Atención y Salud Mental a largo plazo
No hay que subestimar la energía de la felicidad a corto plazo y de los buenos pensamientos para influenciar el curso de nuestra salud mental a largo plazo. Resolver las ansiedades y las tensiones ahora, y regularmente, nos ayudara a estar más sanos, y a desarrollar buenos hábitos. Las buenas sensaciones ahora llevan a buenas sensaciones en el futuro, y los hábitos son lo que necesitamos para cualquier resultado de largo plazo.
En cuanto a los problemas grandes, la atención es una manera de verlos más claramente por lo que son. A medida que nos volvemos mas diestros en la afinación de nuestra propia mente comenzaremos a ver patrones. Una de las cosas que descrubí, por ejemplo, es que mi mente reflexionaba y se preocupaba de todas las opciones posibles en las decisiones que no tomé y eso me causaba una tensión sin fin.
Ver esto claramente, reconocerlo y entender lo destructivo que era este hábito de la indecisión, me permitió cambiar. Comencé a tomar decisiones más rápidamente, solo para intentar una nueva manera. Experimenté inmediatamente cómo la tensión disminuía una vez que la decisión era tomada. Mis hábitos comenzaron a cambiar, y conseguía hacer más con menos ansiedad.
El ejercicio más básico de atención es sentarse tranquilo y comenzar a prestar atención a todo lo que sucede en nuestro cuerpo y mente. Por supuesto esto puede ser difícil si no lo has hecho antes, pero con práctica podrás conseguirlo. La atención a tu mente te facilitará el encontrar soluciones a los asuntos que se pueden solucionar inmediatamente, te ayurá a hacer una lista de aquellos que vas a solucionar después y por último te permitirá reconocer y aceptar con sabiduría que hay otros asuntos que quizás no tengan solución.
La atención va a ayudarte a organizar tu vida y a contribuir a tu salud mental.