Valoricemos el tiempo que se llama hoy.
Hoy es el sol, la vida, la posibilidad, la esperanza ...
Ayer el día que se fue.
Mañana el día que vendrá.
Hoy a pesar de todo, es el tiempo que está con nosotros.
Es nuestra oportunidad de erguir el pensamiento a los más altos niveles, de conquistar la felicidad de las obligaciones bien cumplidas, de proclamar la buena voluntad para con todos y extender las manos a los semejantes ...
Hoy es el momento de renovar el corazón, barriendo los restos de ociosidad, expulsando el vinagre del desencanto, extinguiendo el dolor de la tristeza y pulverizando el recinto del desánimo.
Hoy es el día de sonreír a la dificultad y ayudar con alegría.
Levántate, lucha y vive, porque Hoy es el momento en que el Señor lanza a la tierra la escalera luminosa del trabajo para que escalemos los niveles, hacia su encuentro , en pleno Cielo ...