Soy, impunemente, tu mujer y tu sueño, el verso siempre a escribir y a escucharte, cuanto lates y el curso que sigues desde adentro, el centro de tus lugares y tu lugar gestante.
Soy, impunemente, tu suspiro concreto, el árbol imperfecto que te ramifica, la cornisa donde respiras aires nuevos, el sensual cuello que te estabiliza.
Soy, impunemente, el posible que amordaza tu barca a las aguas de los intentos, el sentimiento con nombre y cara, la bocanada de vida que no te fueron.
Soy, impunemente, tu ternura resucitada, la música sonada que rompe tus silencios, el reto que te resta de las fechas feriadas, las entrañas de la luz y su poseso.
Soy, impunemente, la fuerza en tu debilidad, el levitar de tus cansados pasos, el sí engarzado que te hace caminar, y el dulce mirar donde hallas tu descanso.
Soy, impunemente, mi propia raíz ramificada en ti y en luna creciente, vulnerable temple que se yergue por tí, el punto sobre la i que tu dirección sierpe.
Esencia.
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Soy, impunemente, tu mujer y tu sueño, el verso siempre a escribir y a escucharte, cuanto lates y el curso que sigues desde adentro, el centro de tus lugares y tu lugar gestante.
Soy, impunemente, tu suspiro concreto, el árbol imperfecto que te ramifica, la cornisa donde respiras aires nuevos, el sensual cuello que te estabiliza.
Soy, impunemente, el posible que amordaza tu barca a las aguas de los intentos, el sentimiento con nombre y cara, la bocanada de vida que no te fueron.
Soy, impunemente, tu ternura resucitada, la música sonada que rompe tus silencios, el reto que te resta de las fechas feriadas, las entrañas de la luz y su poseso.
Soy, impunemente, la fuerza en tu debilidad, el levitar de tus cansados pasos, el sí engarzado que te hace caminar, y el dulce mirar donde hallas tu descanso.
Soy, impunemente, mi propia raíz ramificada en ti y en luna creciente, vulnerable temple que se yergue por tí, el punto sobre la i que tu dirección sierpe.
Buenas noches gaviota, gracias por estar y compartir en este tu vuelo
te deseo un dia maravilloso de martes, que Dios te bendiga.
la Virgen te acompañe y los Angeles te guien
besitos y bendiciones
Cada nuevo amigo que ganamos en la carrera de la vida nos perfecciona y enriquece mas aun por lo que de nosotros mismos nos descubre, que por lo que de el mismo nos da.