Que escandaloso suele ser el silencio cuando es provocado por la soledad absoluta, miro hacía dentro de mi persona y noto que hay piezas sueltas pero que nadie podrá reparar porque me niego a pedir ayuda, no es orgullo, no me interpretes mal se llama miedo, mis piezas tan frágiles como el cristal y tan desgraciada humanidad que no me atrevo…

¿Darle la oportunidad a un miserable?, que acabe de quebrantar lo que otros no concluyeron, mis días son eternos pensando en la nada y despertando golpeada de aquello que ayer fueron pétalos suaves
no busco culpables, tampoco quien me lo pague, no busco revancha ni busco salvarme estoy en la rama, allá en lo alto de aquello frustrante, busco calor pero hasta el más mínimo grado de calefacción suele quemarme…

Busco una voz pero hasta el más suave tono suele asustarme
fui incomprendida, necesito una mano, y si extiendes la tuya quizá llegue agredirte, no me juzgues, porque tú no sabes lo que sufrí, no sabes lo que viví, deseo un abrazo como no lo ha hecho nadie,
pero no te me acerques que puedes matarme, mira mis ojos llenos de angustia, la misma que tú me causaste…

Ya no intentes escuchar mi voz, la misma que tú silenciaste, yo vine a este mundo porque tú me engendraste o no tenía nadie más que a ti para cuidarme, dime, ¿tú que hiciste en vez de amarme? ¿Nunca doblaron tu razón las lágrimas que tu misma me forzaste? ¿Qué con tu odio desmedido y sin razón tu misma me accionaste? ¿Sabes lo que es la depresión?

Es el profundo abismo al que tú me mandaste, quebraste mi inocencia y mis anhelos censuraste, tengo miedo de quien se me acerca y no es por cobarde, pero bien dime tú, ¿cómo se puede confiar en alguien más? si ni siquiera puedo confiar en mi propia madre.

Ser madre no es parir, ser padres es responsabilizarse de un ser indefenso que no tiene culpa alguna y nuestros actos o errores, por lo tanto, no debe pagarlos, un hijo es una verdadera bendición para los que o valoran, y padres son una gran bendición para los que gozan la fortuna de tenerlos, engendrar no significa que seamos padres así como no poder engendrar no significa que no podamos tener hijos.

Les dedico este escrito a los padres, a los grandes padres de niños que no comparten la misma sangre, pero que comparten el mismo corazón, mil gracias por tanto amor. Y dedico una oración a todos los padres biológicos a quienes no les interesa ser padres.