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RECORDÁNDOTE
Es una carta escrita al sentimiento, en donde dejo impreso todo
este sentimiento que me impide sonreir, que tiene mi alma y
corazón envueltos en una coraza de remembranzas del pasado...
Y quisiera volcar en letras la sensación que me domina, sin rimas,
aquí en la soledad de mi habitación y sé que ya casi dan las dos de
la mañana y aquí estoy intentando escribir la carta que debí dejar en
aquéllos días en que mi ser entero se sintió tan lleno de tristeza que
la musa decidió buscar otras manos qué guiar... porque en las mías
sólo melancolía podía dejar... Yo amé, durante largos años amé tu sonrisa,
tus ademanes, tus palabras envueltas en ternura, te escribí mil y un
poemas y eras mi cuento de hadas... y soñaba que un día te tendría
entre mis brazos y te llevaría de la mano por la
orilla de mi mar... soñaba ... solo soñaba....
Pero para que mis manos vuelvan a escribir necesito desahogar este
sentir para luego emigrar hacia ese universo de letras que siempre me
tenía enamorada de los versos... y no sabía qué era la soledad hasta
el instante mismo en que mi camino y el tuyo tomaron rumbos diferentes...
y ahora envuelta en la ruleta de tu vida, rodeada de tantos y tantos seres
olvidaste que un día en un punto lejano del mundo... existía un corazón que
te amaba, un corazón que daba todo de sí para ti... y nunca... nunca ni
en mis sueños más tristes pensé el vivir separada de ti....
Sentimientos que brotan a raudales porque un día... un día hicimos el
juramente de de amarnos aún en la distancia sin importarnos nada más
que este sentir que nació de la nada y se convirtió en algo hermoso
que se disolvió como se disuelven las espumas del mar...
Y mi corazón empeñado en recordarte, se llenó de melancolía al evocar tus
ojos, tu sonrisa y esa, tu manera tan especial de ser... es quizás el
insomnio o la soledad la que me incitaron a ésta carta redactar...
"La distancia es como el viento,
porque agiganta los grandes amores"
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