Mendigo de tu amor, esclavo de tus besos, así es como me siento, tú lo sabes y te aprovechas de la situación,
Me dejas en un rincón oscuro de los lamentos, esperanzado al momento de tener tu corazón, recibiendo en ocasión migajas de sentimientos. Sólo la luna sabe cuántas veces he visto el cielo esperando ver una estrella fugaz para pedirle mi más grande deseo… “Tenerte aquí conmigo”.
Ninguna persona merece tus lágrimas y quien las merezca no te hará llorar, porque te fuiste si no te falle me abandonaste por mentiras que inventaron de mí.