Preparar el camino para encontrar a Jesús.
2014-01-03 Oración preparatoria
Gracias, Señor, por este tiempo de oración. Confío en tu gran misericordia. Te amo y quiero agradecerte el don de tu amistad, especialmente el don de Ti mismo. Ayúdame a amarte como Tú me amas.
Petición (gracia/fruto que se busca)
¡Ven, Espíritu Santo! Necesito de tu luz, de tu sabiduría, para reconocer y escuchar a Cristo en esta oración.
Texto base para entablar el diálogo con Dios
Del santo Evangelio según san Juan 1, 29-34
En aquel tiempo, vio Juan el Bautista a Jesús, que venía hacia él, y exclamó: «Este es el Cordero de Dios, el que quita el pecado del mundo. Este es aquel de quien yo he dicho: “El que viene después de mí, tiene precedencia sobre mí, porque ya existía antes que yo”. Yo no lo conocía, pero he venido a bautizar con agua, para que él sea dado a conocer a Israel»
Entonces Juan dio este testimonio: «Vi al Espíritu descender del cielo en forma de paloma y posarse sobre él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: “Aquel sobre quien veas que baja y se posa el Espíritu Santo, ése es el que ha de bautizar con el Espíritu Santo”. Pues bien, yo lo vi y doy testimonio de que éste es el Hijo de Dios».
Palabra del Señor.
Meditación (profundización propuesta, si bien se sugiere sea algo personal)
Preparar el camino para encontrar a Jesús.
«El servicio que han prestado en estos días me ha recordado la misión de san Juan Bautista, que preparó el camino a Jesús. Cada uno de ustedes, a su manera, ha sido un medio que ha facilitado a miles jóvenes tener “preparado el camino” para encontrar a Jesús. Y éste es el servicio más bonito que podemos realizar como discípulos misioneros: Preparar el camino para que todos puedan conocer, encontrar y amar al Señor.
A ustedes, que en este período han respondido con tanta diligencia y solicitud a la llamada para ser voluntarios de la Jornada Mundial de la Juventud, les quisiera decir: Sean siempre generosos con Dios y con los otros. No se pierde nada, y en cambio, es grande la riqueza de vida que se recibe.
Dios llama a opciones definitivas, tiene un proyecto para cada uno: descubrirlo, responder a la propia vocación, es caminar hacia la realización feliz de uno mismo. Dios nos llama a todos a la santidad, a vivir su vida, pero tiene un camino para cada uno» (S.S. Francisco, 28 de julio de 2013).
Diálogo con Cristo
Dedica unos minutos a tener un diálogo espontáneo con Cristo, de corazón a Corazón, a partir de lo que haya llegado al propio interior, de lo que te haya dicho Dios.
Propósito (es mejor que surja del diálogo íntimo que se ha tenido con Cristo)
Hoy, viernes primero de mes, comentaré a otra persona las promesas del Sagrado Corazón a santa Margarita Alacoque. Si no las conozco, buscaré cuáles son.
«Es muy extraño saber ser humildes, es muy extraño saber dar el sitio preferencial a la fe sobre la razón; pero cuando lo logramos, comenzamos a recorrer como nadie los caminos de la paz y de la íntima felicidad»