Un sueño
En visiones de negra noche he soñado en la alegría audente. Pero un despierto sueño de vida y luz me dejado roto el corazón.
¡Ah! ¿no es pues un sueño de día para él cuyos ojos se fijan en cosas a su alrededor con un rayo vuelto al pasado?
Ese sagrado sueño, ese sagrado sueño, mientras todo el mundo me regañaba, me ha alentado como un bello rayo de luz guiando a un solitario espíritu
Que aunque aquella luz a través de la tormenta y la noche tanto temblaba desde lejos, ¿qué podía ser más puramente brillante en la diurna estrella de la verdad?
|