Los hombres en el cielo
Una catástrofe provoca millones de muertos. Muchos de ellos llegan al cielo al mismo tiempo, complicando su recepción.
Para ordenar la tarea, el mismo Dios sale a recibirlos y ordena que se formen filas separadas para hombres y mujeres. Como esto es insuficiente, se le ocurre pedirle a los hombres que hagan dos filas: los que dominaron a sus esposas en la primera y los que fueron dominados por ellas, en la segunda.
Al rato, Dios se encuentra con que la fila de los dominados tiene kilómetros y que en la otra hay un sólo hombre. Molesto por el enorme número de dominados, pide atención y poniendo al dominador como ejemplo solicita que le explique cómo fue que logró estar en esta fila.
El hombre contesta: -No sé. ¡Mi mujer me dijo que me pusiera aquí!