No está de más, sin embargo, apuntar una medida también preventiva para tenerla en cuenta en caso de que el SARS-CoV-2 entre a la Isla: desinfectar el teléfono celular así como la laptop y la PC, en particular teclado y ratón.
Y aún cuando eso no suceda, esa higienización es de todos modos necesaria porque está comprobado que un teléfono móvil acumula diez veces más microorganismos que un servicio sanitario.
Como promedio, el celular se manipula más de 50 veces al día, justo con las mismas manos con que anteriormente se han tocado en espacios públicos pasamanos, picaportes, interiores de transportes colectivos, dinero y un amplio etc.
Para higienizar el teléfono -y también los otros medios mencionados- no hacen falta sustancias ni instrumentos complicados y los pasos son simples:
-Primero, apagar el teléfono.
-Utilizar un pañito de microfibra preferiblemente, de esos que se usan para limpiar los espejuelos. En caso de no contar con uno, elegir algún tejido suave que no suelte pelusas. No es recomendable usar servilletas de papel ni papel higiénico porque podrían rayar la pantalla.
-Preparar una solución de agua tibia y jabón con la que humedecer levemente el pañito, no demasiado para que no se mojen los puertos u otras entradas.
Hay sustancias que acaban con los virus y bacterias, pero también podrían acabar con el teléfono, que posee capas oleofóbicas e hidrofóbicas, la primera para que las huellas digitales no queden tan marcadas, y corren el peligro de ser destruidas si se le aplican ciertos limpiadores.
Ni solución con cloro ni con vinagre, su poder abrasivo es perjudicial para el móvil y otras pantallas. Aun cuando en muchos casos se emplean micas protectoras de la pantalla, de todas formas, no es conveniente emplearlas y tampoco limpiar puertos o sectores donde haya conectores.
La solución jabonosa no debe rociarse directamente sobre el teléfono, sino frotarla con el pañito.
Y no es que el agua y el jabón se hayan vuelto de pronto mágicos, sino que el nuevo coronavirus tiene una delgada membrana recubriéndolo que se destruye con esa solución jabonosa.
En el caso de los teclados de laptop y computadoras de escritorio, para limpiarlos debe emplearse preferiblemente uno de esos bastoncillos con algodón en los dos extremos, o, en su defecto, un palillo de dientes donde se enrolle algodón en sus puntas.
Pudiera ser riesgoso pasarles un paño mojado con la solución jabonosa por el peligro de que la misma escurra entre las letras.
El mouse o ratón también debe ser higienizado.
Fuente: Cubasí