Por las puntas de los dedos se me escapan
las lujurias y los besos contenidos.
¡Tanto tiempo que los tuve entretenidos
y a la vuelta de los años se derraman!.
Piel blanca ofreciéndome su amor
bajo un sueño. Pues que sea realidad
aunque sea en la bruma de unos labios
que hasta ahora solo saben de maldad
pues me hieren, atormentan bajo palios
que parecen ocultar su falsedad.
Delirio de este amor desesperado
que busca y solo encuentra su verdad.
Se me escapa por la luz del pensamiento
el señuelo de tu verbo sin sentido
que me atrapa, que me tiene adormecido
y termina con mi alma y con su aliento.
Mientras dudo en traducir tus abstracciones
y maldigo tu verbo enrarecido
sacrifico mi ego, al tuyo más sentido,
con profundas y sinceras emociones.