A TODAS LAS MADRES
Tú que das vida al ser que le diste vida. Tú madre abnegada. ¡ Oh ser querido, y elegido por la Naturaleza para realizar el gran milagro!
Madre querida, madre sufrida en su desvelo y celo, hacia el ser engendrado. ¡ Ay, madre que en tu silencio vas conquistando el Cielo !.
Porque con tus sentimientos y pensamientos ensimismas tu obra y alimentas su alma. ¡Oh, madre callada y siempre entregada, jamás valorada.
Pero, tú madre, eres llama eterna que nunca se apaga y alimenta tu alma. ¡Ay madre, luciérnaga de la familia. Luz suave en el anochecer, aroma de rosas perfumada y que haces nacer los más puros sentimientos.
Pero tú madre, sabe que al fin ese hijo engendrado, sabrá reconocer la más sublime de las obras. ¡Oh, madre siempre querida, soplo a quién diste vida. Lo vas viendo crecer, siempre niño y jamás lo olvidas, mas él engrandecerá tu obra.
¡ Qué bella e inmaculada es la palabra MADRE ! Hoy te recuerdo madre. Tu que me diste vida.
Jose I Roca H ( Derechos reservados) |