LA VELOCIDAD DEL DESORDEN
Qué raros son tus poemas
cuando cuentas las penas
y no te atreves a mirar.
Sales impulsado
como un cohete sin parar,
rompes la velocidad
de la cara y los labios
que te buscan sin cesar
huyes, huyes y no descansas
dejas atrás las manos
el pelo se va alargando
dejando un trazo
de luz y nubes que a la larga
es un rastro al cual
todos podemos encontrar.
Y no dejas de correr
te alejas y vuelves
como si el viento te llevara
de acá para allá.
Apartas las cortinas
miras por la ventana,
el sol te da en la cara
y respiras.
Cierra los ojos,
suelta las lágrimas
que te están volviendo ciego
que te atrapan
los pies se han vuelto alas
y en tu boca un caramelo
endulza las palabras
que si antes daban pena
ahora dan sabor a quien escucha.
Recorramos el mundo
locos por llegar,
montañas, ríos,
mares, valles,
campos, llanuras,
bosques,... una golondrina
nos persigue sonriendo
y en tu oreja una flor
da perfume a este día,
el aroma se respira
te has llevado mis cordones
las zapatillas marchan solas
todo está distinto,
se ha movido el ambiente.
Guauuuu, me gusta.
COMUNERO