Se precalienta el horno a 350 grados. Con las 2 cucharadas de mantequilla se engrasan 2 moldes de 20 x 10 x 7 centímetros. Se forran con papel encerado y se engrasa nuevamente. Se ciernen conjuntamente la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato y la sal. En un envase grande se mezclan bien todas las frutas y el jengibre. Se les agrega la harina en pequeñas cantidades cada vez, revolviendo con un tenedor y con las manos hasta mezclar bien. Aparte y con un batidor de alambre se mezclan los huevos, el azúcar, el coñac y la vainilla y se agregan a las frutas, revolviendo bien. Se llenan los moldes con la mezcla, apretándola bien y alisándola por encima con una espátula. Se meten los moldes en el horno y se hornea por 60 a 65 minutos o hasta que al introducirles una aguja, ésta salga seca. Se sacan los moldes del horno e inmediatamente se rocía cada torta con 1 a 2 cucharadas de coñac. Se dejan reposar 5 minutos y se sacan las tortas de los moldes. Se les quita el papel encerado y se ponen las tortas a enfriar sobre una parrilla.