Cuántas veces nos preguntamos, estaré

haciendo bién la tarea?

Sabemos que el Dios, que es ahora el mismo

que hace tres o cuatro mil años; que tiene

el mismo poder soberano, el mismo amor

redentor hacia aquellos que le aman y le

sirven de todo corazón, simplemente

porque él es el Dios vivo

EL INMUTABLE

Sólo debemos confiar en él entonces,

y en nuestros momentos más negros

no perder jamás de vista el hecho de que él

es todavía y será siempre el Dios vivo!

Y nunca le fallará.