Es la dicha de agradecer a Dios todo lo simple y maravilloso que nos rodea.
Reconocer lo grande y lo pequeño, lo fugaz y lo perdurable. No lo mucho,
sino lo esencial. No lo tanto que poseemos, sino lo maravilloso.
SI NO AGRADECES Te sentirás pobre no por lo poco que tengas, sino por lo
mucho que esperes.
La riqueza verdadera está en reconocer, agradecer y valorar lo que Dios nos dá.
El mayor tesoro es el que está en nuestro interior, en nuestro corazón.
Todo lo que hay en tu interior nadie puede robarlo ni comprarlo.
AGRADECE la dicha de ver un amanecer, pues un día ya no lo verás.
AGRADECE al Padre el amor que puedas brindar.
AGRADECE El canto de las aves, el verdor de los montes, la risa de un niño, el tener tu familia, el amor de los ojos amados.
Porque será lo único que te quede al final de los días.
Conoce la dicha de AGRADECER todo lo bello que tienes a tu alrededor .
Olvida los días nublados, y AGRADECE tus horas de sol y tus noches
estrelladas.
Olvida los momentos en que fuiste derrotada y analiza las enseñanzas que te ha dejado, y AGRADECE las batallas que has
ganado.
Olvida los errores que no puedes cambiar,y AGRADECE las lecciones que has
aprendido y lo mucho que puedes enseñar.
Olvida los días en que has estado sola y triste, y AGRADECE las sonrisas que has encontrado y tantas que encontrarás.
Olvida los planes que fallaron, y AGRADECE que podrás poner en marcha un nuevo plan..........
Desde la distancia recibe mi amor para ti y tengo mucha gratitud para con Dios.
¡Dios bendiga tu vida amiga!