CRUENTO OLVIDO
Ahora, que de mi pecho afloran agoreras sensaciones por venir. Silenciosa… yaces alma mía en el balcón de mis memorias, buscando desesperadamente recordar tan sólo la sonrisa de mi amante compañera.
¡Pronto!, una lágrima ahoga mi desconocida razón, y frío temor asoma la vigilia cuando en mi mente te pierdes querida ahora que te amo sin medida. Mas la dolorosa realidad de muerte hiere mi corazón. ¡Cruento olvido! en mí vas germinando volviendo ingrata mi razón, no queriéndolo así, mi fiel corazón.
Grito en silencio, lloro tu ausencia, desgarro mis sentimientos; y clemencia a la vida pido porque te pierdo en mis recuerdos.
Ahora que se mecen los recuerdos tengo miedo a esta locura. mas tu dulce voz… muy presta a mis lamentos, tu nombre, al fin, a mi mente asoma y llorando comprendí que un instante yo te perdí.
Busco cambiar lo irremediable como guarecerme con las manos en un diluvio. Ahora que afloran agoreras en mi pecho encontradas sensaciones. En la luz de tu mirada me voy perdiendo, no permitas que mi mente se quede sola… muy sola sin tus recuerdos.
En un recóndito rincón de mi mente tembloroso a la vida imploro que tus recuerdos, conmigo queden, pues viendo mi dolorosa realidad ya no le temo a la muerte, sólo temo perderte en mi memoria ahora que te amo sin medida.
Ahora, que se mecen los recuerdos, acorralado estoy por el olvido ¡qué precoz corroe mi memoria! y despojándome va, mi preciado tesoro.
Yo, no puedo perderte mas… deseo mi muerte dulce amada mía.
Raúl Valero
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