Dos elementos caracterizan el proceso de diagnostico de la enfermedad de Alzheimer:
- el tiempo que se requiere para establecerlo, de 16 a 22 meses después de los primeros síntomas,
- la palabra que le califica: es una enfermedad de Alzheimer "probable"
Siempre un diagnostico de especialista
Necesita tiempo. Las exploraciones son complejas y la lista de espera larga. Pero no es la única razón. A menudo, los tests psicométricos que se realizan después de la primera consulta no permiten afirmar el diagnostico yes necesario repetirlos al cabo de 6 meses. Si existe una agravación y que se demuestra que las capacidades cognitivas están en declive. Se puede evocar el diagnostico de enfermedad de Alzheimer.
Siempre un diagnóstico de probabilidad
No existe un examen biológico que nos permita afirmar el diagnóstico de esta enfermedad estando el enfermo vivo, como en el caso del serodiagnóstico del SIDA donde se logra un diagnostico seguro a partir de la muestra de sangre (y del análisis serológico).
El diagnóstico sólo puede establecerse con certeza gracias a las lesiones cerebrales, es decir después de la muerte del enfermo.
El diagnóstico es siempre un diagnóstico de probabilidad y no es de extrañarse que sea cualificado de "enfermedad de Alzheimer probable". La única prueba definitiva son las lesiones específicas que descubre el examen histológico del cerebro.
La palabra "probable" plantea a las familias numerosas dudas. Si el diagnostico es "probable", siempre cabe la esperanza de no ser el correcto.
Hay condiciones bien establecidas por las clasificaciones internacionales para definir el diagnostico como "probable". Son las siguientes:
- existe un cuadro de "demencia" caracterizado por trastornos de memoria predominantes, asociados a los síntomas siguientes:
• trastornos del lenguaje (afasia),
• disminución o incapacidad en la realización de actividades motrices aunque no presente parálisis (apraxia), en el reconocimiento o identificación de objetos aunque no presente ningún trastorno de la visión (agnosia),
• dificultades para planificar, organizar, realizar secuencias o pensar de forma abstracta,
- estos elementos tienen una severidad suficiente como para repercutir en la actividad social o profesional, y presentar un declive en relación a la actividad anterior,
- la evolución ha sido progresiva e insidiosa.
Siempre un diagnostico de exclusión
Ante este cuadro, las exploraciones sirven tanto para descartar otra enfermedad cerebral degenerativa (tumor, hematoma crónico secundario o incluso un traumatismo ligero, hidrocefalia) como para asegurar que no existen factores capaces de crear déficits suplementarios, como las lesiones vasculares cerebrales, una carencia vitamínica….
Siempre un diagnostico infravalorado
Se estima que casi la mitad de los enfermos no están diagnosticados…y por supuesto no benefician de las ventajas que ofrece el tratamiento lo que es un fallo muy importante en la detección y el acercamiento terapéutico de la enfermedad.
¿A qué se debe esta situación que existe en la mayoría de los países desarrollados? Insistimos…en los países desarrollados y no en los países en vía de desarrollo.
¿A la falta de concienciación del publico que no acude al médico por trastornos de la memoria? ¿A la idea todavía muy habitual de que el envejecimiento es el único responsable? ¿A la falta de interés de los médicos para esta patología que sigue asustándoles o a la dificultad que encuentra el enfermo para entrar en el circuito médico que le encaminara hacia un diagnostico correcto?
Comentarios de la FAE
- ¿Es de fiar el diagnostico "probable"?
Los estudios post-mortem, es decir el examen histológico de los cerebros de enfermos diagnosticados de Alzheimer "probable", demuestran que el diagnostico "probable" logra una fiabilidad de más del 90 %.
- ¿Qué es el diagnostico "precoz"?
Se hace hincapié sobre el interés del diagnóstico en la fase precoz de la enfermedad. Es muy importante porque es el momento óptimo para que los medicamentos actuales sean eficaces.
- ¿Qué es la "segunda opinión"?
Como el diagnostico definitivo de enfermedad de Alzheimer es imposible antes del examen histológico del tejido cerebral, siempre persiste una duda sobre su veracidad.
Además, tanto el enfermo como miembros de la familia pueden albergar la esperanza de un "falso diagnostico positivo". En estos casos, se recurre a pedir una "segunda opinión".
Consiste a proporcionar el dossier medico del enfermo a un especialista distinto del que hizo el primer diagnostico y pedir su opinión sobre el caso. Esta "segunda opinión" avala o no el primer diagnostico.