Falete

¿Cómo definirías este tercer disco "Coplas que nos han matao"?

Es el más Falete de los tres, porque canto los dos géneros que más me gustan, la copla y el flamenco. Canto "La salvaora" de Manolo Caracol y "Nuevo día" de Lole y Manuel. No deja de ser flamenco pero sigue habiendo copla.

¿Qué has querido expresar con un título tan chocante?

Es una expresión muy andaluza, muy de mi tierra, muy mía, muy nuestra. Cuando tú ves a un bailaor que baila que quita el sentío tú dices "¡me ha matao, me ha matao, hoy me voy a emborrachar!". Y por eso a todos nos han cantado en una noche de juerga coplas que nos han matao.

¿Qué criterios has seguido a la hora de seleccionar las canciones?

El que me gusta. Las he oído siempre en mi casa, se las he oído cantar a mi abuela. Son canciones que marcan una época, de aquella España, de aquellos años de la censura, de la España negra. Y es bonito recuperar eso, porque la gente nueva que va naciendo, que va queriendo escuchar música, es bueno darle eso, darle esa parte de nuestra cultura para que no se pierda y siga, claro está.

Falete

Se han quedado fuera un montón. En realidad, a mí me gusta mucho lo que sea arte, pero claro si te pones con uno, con otro y con otro no haces un disco, haces una antología. Y la verdad que la cosa no está todavía paeso.

¿Qué significa para ti la copla?

Es una manera de vivir. Pasa como con el flamenco, es una manera de vivir, una manera de sentir, una manera de comer, una manera de amar, una manera de odiar, una manera de reprochar, de pedir, es una infinidad de cosas. En conclusión, es un tipo de vida.

¿Cuáles son tus referentes artísticos en el mundo de la copla?

Sin nombrar a nadie, todo y toda la que ha hecho y el ha hecho arte y se ha mantenido hasta el último momento y ha dejado el escalafón cuando realmente ha querido, ese es un referente mío. Sin nombres.

¿Qué has querido aportar a estos clásicos de la canción española?

He querido recuperar esas canciones que estaban un poquitín dormidas y hacerlas más actuales.

He buscado refrescar un poco. En realidad yo crear no he creado nada. Ya lo que yo hago lo hacía Bambino hace 40 años, por ejemplo. Bambino era el más flamenco del mundo y el más folclórico del mundo.

¿Qué he querido aportar? Pues una voz fresca, una voz nueva, un algo nuevo. Ampliar un poco más el horizonte. Recuperar esas canciones que estaban un poquitín dormidas y hacerlas mías, hacerlas más actual. En realidad tú las oyes, te siguen sonando, se sabe qué tema es, pero suena nuevo, no está rancio, no está viejo.

¿Qué destacarías de este género musical tan español?

A quién no le gusta una copla u otra. Seguro que todo el mundo hemos escuchado más de una vez algunas, y hasta las hemos cantado, aunque a algunos les de vergüenza decirlo.

Ha sido un género que siempre ha estado muy marcado hacía la mujer, muy encasillado en ese sentido. Parecía que por narices la copla era para la mujer. Y no se le puede olvidar a nadie que Manolo Caracol cantó copla, que Miguel de Molina cantó copla, que Farina cantó copla, y eran los más flamencos del mundo cuando tenían que serlo.

Sin lugar a dudas este es tu disco más flamenco. Se abre con una versión de Lole y Manuel y se cierra con un homenaje a Caracol.

Y para que quieres más?!

¿Qué significa para ti el flamenco?

Yo vivo por y para el arte.

Mucho. Exactamente igual que la copla. Yo encasillaría esos dos géneros en una sola palabra, en arte. Y yo vivo por y para el arte.

Pero, ¿qué similitudes y qué diferencias hay entre uno y otro?

Para mí diferencias ninguna y similitudes muchísimas. Arte, una sola palabra, arte. El que es flamenco de verdad ama aunque se olvide, aunque la gente no quiera. El que es folclórica de verdad ama y vive, y vibra y llora, y se emociona y ríe. Es un sentimiento tan profundo que en realidad no tiene explicación. Y a la misma vez de ser tan profundo y tan tuyo puede ser tan inmenso y tan grande que no tiene ningún calificativo más que arte.

Sin embargo, desde determinados sectores flamencos se ha menospreciado la copla tachándola de ligera y folclórica.

También hay cantes muy livianos dentro el flamenco, que son los más feos de España y del mundo y en cambio se cantan, y también se menosprecian dentro del flamenco. Pero bueno, yo creo que eso es ya algo personal de cada uno. Es cierto que el libro de los gustos está en blanco y tiene más de una página que está demasiado negra, demasiado manchada, y no es para tanto en realidad.

¿Y como artista intentas barrer un poco esas barreras y eso estereotipo?

Yo simplemente hago lo que me da la gana.

No. Yo simplemente hago lo que gusta, lo que me apetece y lo que me da la gana. Y como se que a mi público le gusta, que es verdaderamente el que me importa, pues ya está, palante. Lo que diga el de fuera, sinceramente, me importa un carajo.

Si te mirases a un espejo, ¿cómo te verías a ti mismo como artista?

No. Yo simplemente hago lo que gusta, lo que me apetece y lo que me da la gana. Y como se que a mi público le gusta, que es verdaderamente el que me importa, pues ya está, palante. Lo que diga el de fuera, sinceramente, me importa un carajo.

Si te mirases a un espejo, ¿cómo te verías a ti mismo como artista?

Yo diría "¡Ole, ole tú!". Es muy difícil definirse a uno mismo. Lo que sí tengo claro es que quiero seguir aprendiendo mucho, que quiero cantar cada día mejor, aprender de todos los grandes, de todos los sabios tanto de la copla como el flamenco, y no quedarme ahí. Yo no quiero ser agua estancada, quiero ser un río que corra y que arrase con todo lo que pueda.

Como hemos hablado "Coplas que nos han matao" arranca con una versión "Nuevo día" de Lole y Manuel. ¿Por qué?

Nunca nadie les versionó, nunca nadie los cantó. Lole y Manuel están olvidados siendo tan grandes y tan criticados como fueron en su momento. ¿Ahora se les reconoce? No, ahora no, hay que reconocerlos desde primera hora y hay que claudicar.

Lo que es puro, auténtico y arte de verdad hay que reconocerlo en su tiempo. Lole es una artista como la copa de un pino y Manuel otro pedazo de artista. Con esta versión yo quiero reivindicarlos, Mira como lo bueno dura y siempre llega alguien y lo rescata, aquí está la prueba.

Lo que es puro, auténtico y arte de verdad hay que reconocerlo en su tiempo.

No hay que tener miedo. Tienes que expresarte tal y como sientes, tienes que ser tú mismo. Tienes que exponer todo lo que llevas dentro de ti, pero con mucha confianza y pies de plomo para que la gente vea que no los estás engañando y para que los malos críticos algún día se coman sus propias palabras.

El disco se cierra con un homenaje final a Manolo Caracol. ¿Qué te gustaría reivindicar de su figura?

Reivindicar simplemente el que Manolo Caracol sea Manolo Caracol y el que Lola Flores sea Lola Flores y que se separe de una puñetera vez el dueto. Fueron una pareja mítica, pero Manolo Caracol es lo más grande que ha dado la historia. Que no se hable hoy en el 2007 de él porque fue, porque estuvo, porque hizo. Que se hable de ese maestro que cantaba como nadie, que creo y que es lo más grande que le ha pasado al flamenco y a la música.

Como artista Manolo Caracol era increíble, una fuente inagotable. Como se suele decir de ahí hay que mamar por narices, porque te deja la boca abierta. Yo para eso soy muy raro, yo no soy capaz de pegarme en un festival dos horas escuchando cante rancio. En cambio, a Caracol puedo pasarme toda la vida escuchándolo que no me voy a cansar nunca. Tiene algo tan distinto a todos los demás, que es diferente lo mires por donde lo mires.

Manolo Caracol es lo más grande que le ha pasado al flamenco y a la música.

¿A qué otros artistas flamencos admiras?

Me gustan un montón. Admiro a La Paquera de Jerez, a La Niña de los Peines, a Fernanda y Bernarda de Utrera, Paco Valdepeñas, El Tiriri, por así hablarte de los más festeros. Puro y rancio, Chocolate. Gente grande y ya está.

¿Cómo te sientes cuando cantas flamenco?

Muy a gusto. Ten en cuenta que yo me he criado en una familia que es muy flamenca y mi raíz yo no la voy a perder. Cuando hay que cantar puro yo soy el primero que canta puro y cuando hay que poner todo el veneno, todo el desgarro y toda la gitanería yo se la pongo, porque la tengo y se acabó.

¿Y entonces para cuándo un disco sólo de flamenco?

Todo tiene su tiempo y como mi público es feliz con lo que le doy y yo también, para que me voy a meter en camisa de once varas y me voy a quebrar la cabeza. De momento sigo como estoy y ya habrá tiempo para todo.