Desconozco el sabor de tu piel, el perfume de tu cabello, el color de esos ojos dolidos y el cálido aliento de tu boca, pero sin embargo respiro sueños y siento el aire lleno de ti. El agua que presuroso bebo en la dulce fontana de marfil, presagia un enigmático mañana que me dice que estas ahí y una llama que alumbra sombras, adormece mi cuerpo y se apodera de su interior. Tal cual la lluvia penetra el aire, un suspiro resbala caprichoso sobre suaves pétalos que se ofrecen, mientras la tarde transita el camino que la noche transforma en misterio. Ansias de sentir y ver ese más allá que enciende la esperanza de un amor sin fronteras .....