Dame el amor que me inspira, y deseo. De tu ser cuando rendida, me das la fruta prohibida cuando dulce te poseo.
Y ese corazón entero, y fiero. De amor me hace palpitar, y siento tu alma gozar cuándo te digo-. Te quiero.
Dame el clavel sonrosado, soñado. De tu alma cautivadora, dámelo porque te adora, mi alma de enamorado.
Dame Celinda el ardor, y el fulgor. De tu cuerpo y tu dulzura, Dámelo que tu hermosura, me enloquece con tu amor.
Hoy nos cantó un ruiseñor......................Sus cantos por nuestro amor.
Mí amigo Salva,es un placer leerte,precioso Tango trajiste
feliz domingo
Juanita
Espero te guste este poema |