Te hice el ¡AMOR! soñando Esta noche soñaba contigo, que hermoso sueño ¡mi amor! sonreías, eras feliz, te besaba, con ¡cariño!, con ¡pasión!, me llenabas de alegría, de ilusión. En mis nítidas y claras imágenes, yo te veía bailar a mi alrededor, quería abrazarte, pero no podía, te reías, jugabas en mis sueños, sabías el ¡deseo! que tenía. Quiero seguir dormido, quiero seguir soñando, quiero que estés conmigo, deja ya de ¡bailar!, que te quiero acariciar, tener tu boca en la mía, besarte, tener tus ardientes labios, saboreando tu saliva. Quiero sentir el calor de tu cuerpo, que tu sientas con ¡placer! el mío, no quiero despertar, es un sueño de verdad, mis manos se deslizan por todo tu cuerpo, ¡oh1 ¡hermosa mujer, cuanto ¡placer!. Por la ventana abierta, entra la suave brisa de la madruga, nuestras caricias ya no paran, siguen con ¡pasión! desenfrenada, mi mano recorre tus turgentes pechos, tus pezones erectos, la otra acariciando suavemente, tu sexo. Ella me está besando, su lengua lame mi pecho, sus manos llegan donde yo deseo, empezamos a gemir, jadeante los suyos, casi a gritos los míos, es tanto, lo que siento de ¡placer! contenido, que al fin llegamos a la vez al orgasmos apetecido. De pronto he despertado, todo manchado, mojado, solo ha sido un sueño, con la mujer que ¡amo1, que deseo, ella está muy lejos, no está conmigo, nos separa la distancia, pero nuestro ¡Amor! es ¡Eterno!. De sueños, ilusiones y de fe, está el mundo lleno J.C.F. |