Estaba Vera y su marido en una playa desierta y el hombre le responde a su mujer:
EL - Claro que te quiero, mujer!!!!
ELLA - ¿Y por qué?
EL – Pues…no sé, así de pronto
ELLA - ¿Lo ves? Si me quisieras sabrías porqué…. Lo que pasa es que no me quieres
EL – Eso será….
ELLA - ¿Y por qué no me quieres? ¿Eh? ¿Qué he hecho yo para que no me quieras? ¿Eh?
ELLA – Sé que me amas con locura, lo que pasa es que tu maldito orgullo te impide reconocerlo….. ¡Eso es lo que pasa!
LOS DOS SE QUEDAN CALLADOS Y AL RATO ELLA PIENSA: