Es la flor su reflejo en el agua del florero. Es, además, su imagen formada ante mis ojos, y también detrás de ellos. Y entretanto, una mezcla del agua (que extrae el tallo de la tierra) con los colores del fresco cielo y del sol que pega. O puede ser también su mismo perfume, el que percibe la abeja, u otro, el que a mí me gusta. Es la flor como yo la veo, y también como ella se piensa. Es un sabor en la boca del insecto. O también es el pétalo suave que me toca cuando cierro los ojos y me concentro en mis dedos. Aún sin estar, está en mi mente, como flor, o una consciencia. ¿Pero cómo será la flor, la verdadera, cómo se piensa? Es un tallo frágil que explota en colores. Es fibra, es moléculas, átomos y subpartículas. Y también la energía de fondo, hecha consciencia trabajada por la naturaleza con la misma materia y energía que hizo con nosotros. Pudiendo ser ave, ese pensamiento, eligió ser flor. Pero ¿quién lo decidió, y quién lo piensa? ¿Es ella la que piensa? ¿Me percibe ella? ¿Cómo me sabe?
¿Cómo me piensa?. Pienso que tiene conciencia, pienso que me, presiente, pienso que se pone bonita, ante mi presencia Tal vez sueñe la flor, tal vez, la flor sueña...con la lluvia, con el florero de porcelana, con adornar una sala, esta sala con vestir un piso de fiesta, o tener una palabra ¡qué bonita flor¡ en la primavera. ¿Sentirá dolor cuando la corto, para adornar tu cabellera? ¿Será la misma flor cuando yo la pienso y cuando ella me piensa?
Ganimedes©╣║╗╝¥