Vivimos en una época que ensalza la racionalidad y el pragmatismo, valores que no alienta precisamente a la esperanza

nos preocupa mas lo material que lo natural.

Es verdad también que por el contrario, cuando nos entregamos a la ensoñación de la naturaleza, nos sentimos mucho mejor.

Nutre tu esperanza con sueños a la naturaleza. Resultarán bastantes más eficaces  que cualquier pensamiento material.

Alberto.