El Día de Muertos es considerado la tradición más representativa de la cultura mexicana.
La celebración se lleva a cabo en dos días:
el 1 de noviembre es dedicado al alma de los niños y el 2 de noviembre a la de los adultos.
El origen del Día de Muertos tiene antecedentes relacionados con el mestizaje.
Comprende rasgos culturales indígenas y españoles que al mezclarse dieron lugar
a todos los ritos y ceremonias que se realizan alrededor de la festividad.
Aunque la celebración anglosajona de Halloween se ha popularizado entre la población,
en la mayoría de los hogares mexicanos la tradición perdura
y se colocan ofrendas con elementos muy particulares.
A continuación te mostramos cinco de los principales aspectos de esta festividad.