JAMÁS DUDES DE Tì
Tienes tanto que ofrecer, tanto que dar, y tanto mereces recibir.
No lo dudes jamás. Conócete y conoces todas tus buenas cualidades.
Regocíjate de las fuerzas maravillosas de mente y cuerpo.
Alégrate de las virtudes que son tuyas, y congratúlate por todas las cosas admirables que has hecho.
Mantén una actitud positiva. Concéntrate en lo que mayor felicidad te da, y confía en tu persona.
Mantén el ágil ritmo de tu corazón, la alegría de tus pensamientos y el bienestar de tu ser.