Calla cariño, que nada turbe nuestro embeleso,
que no se oiga ni una
sola palabra, que no haya ni un solo ruido que
rompa la unión de nuestras almas...
Deja que con mis manos recorra los contornos de
tu cuerpo, que conozca
los secretos que has guardado para mi por tantos años...
Y que por fin hoy que nuestro amor
se ha hecho uno solo,
le dé gracias a Dios por el milagro
maravilloso de la unión.