Quiero amarlo ahora, tiembla mis manos, mis labios y suelto mi cabello poco a poco y dejo libre mis deseos, porque estoy soñando embelesada.
Pero él está lejos, muy lejos y la tarde ha de morir junto con mis deseos lejos como el sol que siempre se marcha y me abandona me deja con el cabello suelto, con la boca húmeda y temblorosa con el alma destrozada.
Pero siempre yo la espero, más allá de la vida de la gente donde solo viviremos tú yo y nuestras esperanzas donde yo cada día te entregare mi amor y solo para ti suelto mi cabello seré solo para ti dulce y hermosa.
Más allá, más allá de la gente donde no exista la envidia donde solo seremos tú y yo más allá te espero yo.
|