El gobierno recae en una persona o un grupo reducido.- En la mayoría de las monarquías que han existido a través de la historia, el gobierno es ejercido por un solo individuo quien detenta la mayoría de los poderes, (militar, político, religioso, económico, etc.), aunque delegue algunas atribuciones a ministros y funcionarios, quienes responden directamente o indirectamente ante él sobre los asuntos concernientes a las funciones que el rey les ha designado. Un ejemplo podrían ser las monarquías del antiguo Egipto, en donde el rey al cual denominaban como “nesu “(faraón para los griegos), delegaba varias funciones a ministros y demás funcionarios quienes tenían que responder cuentas y explicaciones sobre el gobierno de aquello que les había sido designado previamente por el rey.
Hereditarias.- Por lo general son hereditarias, es decir, el gobierno se hereda de padres a hijos o a los familiares más cercanos al monarca que fenece o abdica. Al ser hereditarias se van creando dinastías, mismas que mantienen el poder real en manos de la misma familia, en gran número de ocasiones casándose entre parientes para mantener concentrado el poder. Al ser hereditarias lo común es que pase el gobierno al hijo mayor del monarca (o en su caso a la hija mayor), siguiendo en la línea sucesoria los demás hijos del monarca. También pueden haber designaciones previas por parte del monarca, referentes a quién será el heredero entre los familiares del monarca, lo cual recae generalmente en el hijo mayor o hija mayor, dicha designación previa se hace para evitar posibles rencillas por el poder.
Es vitalicia.-La monarquía es vitalicia, es decir, se ejerce el gobierno hasta la muerte del rey o hasta que el gobernante declina el poder en favor de otra persona mediante la abdicación del gobernante en favor de alguien, (un heredero designado previamente o un familiar que se encuentre en la línea sucesoria de forma inmediata al monarca que abdica el trono).
Regencia.- La regencia es el gobierno que ejerce una persona autorizada en
la monarquía, para desempeñar las funciones del monarca cuando está incapacitado para gobernar, ya sea por ausencia del monarca, incapacidad física o mental que impida que pueda gobernar por sí mismo, o por la minoría de edad del monarca. Puede ser ejercida por un familiar, ministro o persona designada previamente para ello y deja de ejercer el poder de regente cuando el monarca obtiene la mayoría de edad, regresa de su ausencia, u obtiene o recobra la capacidad física o mental para ejercer el gobierno por sí mismo, así como cuando el monarca es remplazado por fallecimiento antes de haber obtenido la mayoría de edad o antes de haber regresado de su ausencia, también deja de ejercer la regencia al ser remplazado el monarca por otra persona mediante el consenso de ministros y nobles o por la medio de la fuerza.
COMPARTIDO CON MUCHO AMOR,
MACHI V