En el transitar de la vida, nos vemos sometidos casi a diario, a enfrentar situaciones en donde debemos o nos vemos forzados a tomar decisiones, elegir que hacer, unas con mayor importancia que otras, pero que todas nos llevan a elegir un solo camino, una sola opción, que mas adelante, esa decisión, escogencia o elección; incidirá directamente sobre nuestro futuro.
Tenemos siempre la libertad de elegir que hacer o decidir, tenemos la libertad de expresar que sentir o vivir. De eso se trata la vida, de disfrutar de nuestras propias experiencias de vida que nos brinde un mejor bienestar desde el Ser.
Podemos elegir ser felices a estar deprimidos. Podemos elegir vivir en amor y en armonía que vivir desde la rabia, odio, rencor y conflicto. Podemos elegir creer en algo, tener Fé a no creer en nada, ni nadie y ser pobre de espíritu. Esto es nuestra decisión, por eso tenemos lo que se llama “Libre Albedrío”. Nosotros escogemos crear nuestra propia realidad, y vivimos lo que hemos creado a nuestro alrededor. Nada es casual en esta vida.
Muchas veces las oportunidades se presentan ante uno, y por no estar desde ese ánimo de amor, de alegría, de convivencia, de armonía, se pierden las grandes oportunidades que brinda la vida, no solo desde el punto de vista material, sino también desde el mundo espiritual, desde ese gozo de lo bello, lo divino, de las pequeñas cosas que si hacen la diferencia en la vida de cada uno de nosotros.
Lo que nos hace fuerte y mejores seres humanos, es la capacidad que desarrollamos cada quien para mejorar desde nuestro interior y que eso lo proyectemos hacia afuera, hacia las personas que entran en contacto con uno a diario. Porque a medida que mas personas se van haciendo consciente que el amor atrae amor y el odio atrae odio, en otras palabras, las energías similares se atraen; entonces podemos colaborar en sembrar una semillita de amor a todas las cosas y seres vivos que nos rodean. Regalar una sonrisa es un pequeño detalle que llena mucho y no cuesta nada. Ser entusiasta con las personas que comparten y trabajan contigo es muy importante porque les inyectas esa energía que ellos quizás carecen y necesitan para responder ante el estimulo de amor. En la medida que damos, recibimos mas!
Mantener una actitud positiva hacia la vida y hacia las demás personas, el respeto, la tolerancia, la convivencia; permite a nuestro espíritu crecer y fortalecerse en Amor.
Si aprendemos a vernos como el reflejo de esa otra persona en nosotros mismos, que esa otra persona Soy Yo, que reconocer carencias y defectos en otros también significa que nosotros somos "todo eso" que dices de la otra persona. No juzgar a otros por los errores de uno mismo es un principio que debemos aprender a manejar.
No importa cuan difícil puede ser la vida o la situación que nos enfrentemos, debemos siempre mantenernos con una actitud positiva, ser alegres y entusiastas; porque eso es lo que realmente nos apega a la vida, vivir con plenitud los años que pasan y hacer que las demás personas se contagien con esa energía para que poco a poco esas semillas vallan esparciéndose y cada vez seamos mas las personas que decidimos hacer algo positivo y que nos gusta en nuestra vida; Que elegimos y decidimos el camino del amor y la alegría a quedarnos esperando sentados a que todo se resuelva desde la infelicidad y la compasión.
Tenemos muchas elecciones en la vida, pero solo un camino nos lleva hacia esa felicidad que el Alma ansia en el transitar de esta vida. Ser coherentes con lo que pensamos, expresamos y practicamos hace la diferencia.
(texto: almaalada.com)