!Venid los moradores
del campo y la ciudad,
y entonemos un himno
de intenso amor filial:
Cantemos de las madres
la ternura, el afán
y su noble atributo
de abnegación sin par.
Celebremos todos la fiesta más bella,
la que más conmueve nuestro corazón;
fiesta meritoria, que honramos con ella
a todas las madres de la creación.
¡Quien, como una madre, con su dulce encanto,
nos discipa el miedo, nos calma el dolor,
con solo brindarnos su regazo santo,
con sólo cantarnos baladas de amor!
De ella aprende el niño la sonrisa tierna,
el joven la noble, benéfica acción;
recuerda el anciano la oración materna
y en su alma florece la resignación.
CORO: !Venid los moradores
del campo y la ciudad,
y entonemos un himno
de intenso amor filial:
Cantemos de las madres
la ternura, el afán
y su noble atributo
de abnegación sin par.
Honrremos con flores la tumba sencilla
de madres que moran en la eternidad,
y ornémos con flores la frente en que aun brilla,
en que aun brilla y fulge la maternidad.
Para ello escojamos frescas azucenas
-simbólicas flores de aroma ideal-,
blancas como el alma de las madres buenas
y con algo místico y sentimental.
Albas estrellitas, nítidas hermanas
de las que circundan la divina sien
de la que es modelo de madres crisitianas,
madre del Dios-Hombre nacido en belén.
Trina de Moya
(Esposa del Presidente de la Republica Dominicana)
(1926)
COMPARTIDO CON MUCHO AMOR,
MACHI V
(Los colores de nuestra bandera. Rojo, azul y blanco.
Marcia Debio ser blanco, pero asi no se ve.)