Pay (Cheesecake) de Parchita - Maracuyá
Esta delicia es uno de los postres más populares y apetecidos en
Venezuela; sus orígenes no son propios de nuestro país pues fueron algunos
cocineros franceses los que se encargaron de adaptar el famoso mousse de chocolate a los
gustos y sabores tropicales, preparándolo con frutas caribeñas como la
guanábana o la parchita. De hecho en Venezuela se le dice mousse de parchita
aunque lleve queso crema entre sus ingredientes. Esta última también se conoce como chinola, granadilla, maracuyá o
maracujá, parcha o fruta de la pasión.
Base:
·
30 galletas dulces de vainilla o mantequilla
·
125 gramos de mantequilla o margarina derretida.
Para el relleno
·
500 gramos de queso crema
·
250 ml. de pulpa de maracuyá (parchita, fruta de la pasión, chinola)
·
150 gramos de azúcar
·
6 láminas de gelatina sin sabor o 2 cucharadas de gelatina en polvo sin
sabor.
·
200 ml. de nata líquida para montar.
Para la cobertura
·
2 láminas de gelatina sin sabor o 1 cucharadita de gelatina en polvo
·
125 ml. de pulpa de maracuyá
·
2 cucharadas de azúcar.
Un molde para
cheescake desmontable de 22 centímetros de diámetro.
Base:
Con la ayuda de una picadora trituramos las galletas y las llevamos a un
bol. Derretimos la mantequilla en el microondas y la mezclamos con las gallegas
Vamos a utilizar el molde al revés, es decir, con lo de arriba para abajo. De
esta manera será más fácil desmoldar el cheesecake. Colocamos el molde en el
centro de un pedazo de papel antiadherente para horno que sea unos 4-5 cm. más
grande que el molde. Comenzamos a torcer y a curvar el papel alrededor del
molde, debe quedar bien apretado y ajustado. Cuando lleguemos al final, dejamos
un pedacito un poquito más largo y lo pegamos con cinta adhesiva.
Vierte dentro del molde la mezcla de galletas y con la ayuda de la base de
un vaso, aplasta de manera que cubras uniformemente todo el fondo.
Para el relleno:
Remojamos las láminas de gelatina en agua fría hasta que se esponjen y
ablanden. Mientras tanto, en una olla calienta la pulpa de maracuyá, sin que
hierva. Retiramos del fuego y colamos para extraer todas las semillas;
devolvemos el líquido a la olla. Agregamos el azúcar al jugo o zumo caliente y
esperamos a que se disuelva. Seguidamente añadimos la gelatina, revolvemos y
esperamos a que esta se disuelva completamente. Dejamos para que se enfríe.
Montamos la nata líquida. En otro recipiente, removemos con un batidor de
mano, el queso crema hasta que esté libre de grumos. Agregamos parte del
queso a la gelatina para atemperar la mezcla. Esto es importante, ya que si se
agrega la gelatina caliente a la mezcla, ésta se endurece de inmediato y la
masa no quedará homogénea. Añade el resto del queso y mezcla bien cuidando que
todo quede bien integrado.
Con la ayuda de una espátula, agregamos en varias tandas la nata montada y
mezclamos con movimientos envolventes. Debe quedar una masa homogénea y
brillante. Llevamos la mezcla al molde, encima de la base de galletas y
esparcimos bien. Le damos unos golpecitos contra la encimera de la cocina o
sobre una mesa, para que no queden burbujas de aire en la masa.
Llevamos la tarta a la nevera para reposar entre 4 y 6 horas para que se
endurezca, también puede ser de un día para otro.
Para la cobertura:
Remojamos las láminas de gelatina en agua fría hasta que esponjen y
ablanden.
En una olla calentamos la pulpa de maracuyá, esta vez no hay que colar las
semillas. Agregamos el azúcar, y cuando esté disuelto retira del fuego y añade
la gelatina, remueve bien para que se disuelva completamente. Espera a que se
enfríe un poco antes de colocarla sobre el cheesecake. Cuando esté atemperada y
aún líquida, la agregamos, nivelamos la superficie, si hemos dejado las semilla debemos distribuirlas para que
queden y distribuye las queden bien repartidas en toda la cubierta.
Dejamos reposar en la nevera por una hora o hasta que se endurezca.
Desmoldamos y a disfrutar de esta receta con la fruta de la pasión.