Pinceladas eroticas
…Deshizo el nudo lateral del tanga y ella quedó por fin, absolutamente desnuda. Dirigió su lengua hacia el botón secreto del deleite, lo recorrió, alternando con visitas a todo el conjunto de pliegues y recovecos que componían aquella admirable máquina de placer y vida, que eran los genitales de la mujer. Ésta se retorcía tensando sus ligaduras, sin poder resistir, gemía y gritaba cuando su vientre se convirtió en un manantial inagotable. Andrade recogió aquel dulce licor y subiendo hasta la boca de ella susurró Y ahora, pruébate tú a la par que la besaba hundiendo la lengua entre sus suspiros, y, en el mismo movimiento, penetró profundamente en su interior, de forma que quedaron unidos hasta el extremo. Desató también los nudos de las muñecas de modo que ella pudo abrazarle. Sólo sus pies quedaron inmovilizados mientras los cuerpos se agitaban frenéticamente hasta que ambos alcanzaron al tiempo su liberación con un segundo orgasmo simultáneo aún más liberador que el primero, tras el que quedaron abrazados y exánimes. Sacando fuerzas de flaqueza, aún pudo Andrade desatar los tobillos de Teresa, permitiéndole así relajar sus ya doloridos músculos. Volvieron a abrazarse y se sumieron en un profundo sueño.