R/. Recordamos, Señor, tu gran amor.
Grande es el Señor y muy digno de alabanza,
en la ciudad de nuestro Dios.
Su monte santo, altura hermosa,
es la alegría de toda la tierra. R/.
El monte Sión, en el extremo norte,
es la ciudad del rey supremo.
Entre sus baluartes ha surgido Dios
como una fortaleza inexpugnable. R/.
Recordamos, Señor,
tu gran amor en medio de tu templo.
Tu renombre, Señor, y tu alabanza,
llenan el mundo entero. R/.